Repetimos como una letanía eso de la participación y el desarrollo rural de arriba abajo. Y es que estamos convencidos de que son el mejor método para un desarrollo rural sostenible y eficaz. Pero el método necesita cimientos, y ese es el conocimiento, la información. Vivimos en nuestros pueblos, tejemos allí nuestras redes sociales, formamos asociaciones, hablamos, conversamos, nos preocupamos los unos de los otros. Todo esto nos permite conocer de primera mano lo que necesita la comarca, sus pueblos y sus gentes.